El Colágeno Natural, favorece la formación de nuevas fibras y, por lo tanto, la restauración del tono.
Elsa Fischer de Tovar, creadora del producto, descubrió la forma de extraer el colágeno nativo de animales, cuando hace algunos años, buscaba sustancias naturales para aliviar el impacto de medicamentos tópicos para la piel. Necesitaba una sustancia que redujera el daño de medicamentos agresivos, que fomentara la hidratación y la regeneración de los tejidos cutáneos.
En su búsqueda, se encontró con el Colágeno Natural. Ojo: sólo un colágeno estructuralmente no dañado puede ser utilizado para la piel.
Las pruebas de laboratorio han demostrado que el Colágeno Natural no es tóxico, ni produce irritabilidad en ninguna membrana (ni siquiera la ocular), por lo que su empleo es posible en cualquier parte del cuerpo.